lunes, 4 de febrero de 2013

autodedicado

 Bosque Varas (San Juan de Cuyo, noche de enero de 2013)
 
 

Desde que te conocí
no dejo de pensar en por qué
las cosas duermen mientras las pensamos.

Si para oir la propia música
hay que ensordecer
doy fe a mis abismos
en donde todo es tan real como innecesario

y no quisiera soltarme nunca de tu mano.


1 comentario:

  1. Qué bonito encontrarme con este pequeño poema que al mismo tiempo dice tantas cosas...

    Me gusta.

    Un saludo desde http://retales-de-mis-noches-de-insomnio.blogspot.com.es/

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